Soy Paola Carrasco, una mamá de tres niños. Sí!!! tres varones… que me traen loca, a veces con sus gritos, con sus ideas, peleas, con sus risas, sus ocurrencias, sus abrazos y besos.
Así como ellos son intensos, unos días son más buenos que otros, lo mismo esta mamá, a veces es muy sensata y muestra lo mejor de sí, hacemos escuela en casa, salimos a ver el cielo y los pájaros, otras veces bailamos y cantamos, hacemos galletitas, dibujamos, reímos, vemos películas, armamos rompecabezas y lego; pero otros días soy un desastre y siento que, en vez de disfrutar la grandeza de ser 100% para ellos, me la paso quejándome o con el móvil en la mano. Al igual que los días de ellos, cada día es diferente para mí, y no es que sea bipolar (espero…) es sólo que soy una persona como cualquiera, una persona que lucha, soy sólo una mamá.
Criando Lejos…
Siempre pensé que criar significaba no sólo hacerlo en una familia nuclear (mamá, papá y niños) sino en familia extensa, soy de Bolivia, entonces estoy acostumbrada a las familias numerosas, donde se añade no sólo a la familia de sangre, sino a la familia por elección, amigos, vecinos, comunidad en la crianza. Por varios motivos vivimos lejos de mi país y eso me obliga a crearme una comunidad propia, una tribu propia, con gente linda que voy conociendo, gente de carne y hueso y gente virtual (y virtuosa); pero para no perder mi identidad, nuestra identidad (mía y de mis niños) he decidido crear este avatar mío, donde escribo día a día páginas de mi vida como mamá.
Respaldo Intelectual
Si tengo sustento intelectual? Bueno, estudié comercio exterior y administración de empresas a nivel licenciatura, tengo una Maestría en Educación Técnica y Vocacional y terminé un Doctorado en Gestión de Proyectos Educativos (me falta la defensa de la tesis, por razones obvias que no hice aún, mis tres hijos pusieron en espera muchos proyectos profesionales y personales, pero le dieron un matiz mucho más complejo y rico), viví varios años -de maestría y doctorado- en Alemania. Me dediqué como freelancer a desarrollar y gestionar proyectos y es la rama que más me gusta de mi carrera, ser proyectista, trabajé varios años impartiendo docencia en distintas universidades.
Soy una persona muy organizada (ups! casi inflexible! cuánto aprendo de flexibilidad con mis tres cachorros y sobre todo mi esposo jeje!) y viví algunos años frustrada porque mientras mi amor e instinto de madre me decían que lo ideal era quedarme con los niños, sabiendo que la calidad – empezando de la educativa- y la cantidad de dedicación a los niños es un lujo hoy en día; sin embargo, dejar de lado mi vida académica y profesional -lógicamente también mi independencia ecónomica- para cuidar niños fue siempre un dilema personal. Hasta que llegué a varias conclusiones.
Mis reflexiones:
- Decidí que mi mayor proyecto es mi familia, que todo lo invertido tiene un retorno de mucho más que el 100%, que un niño atendido por sus padres es un niño seguro, un joven confiado y un adulto pleno.
- Pasé varios años haciendo home-schooling con mis hijos -es por eso que tengo bastante material de trabajo en proyectos con la transversal educación en valores- trabajando con la metodología de proyectos -en la cual tengo amplia experiencia y tiene una lógica trans y multidisciplinar.
- Un proyecto de unidad familiar es no sólo el proyecto más completo, sino el más complejo porque si bien es multifactorial e impredecible las bases son mi responsabilidad, mi entrega, mi formación y sobre todo el amor que le ponga todo lo que hago.
- No sólo se trata de formar personas pequeñas sino también de formarme a mí misma, que aún siendo adulta soy un proyecto inconcluso, y que me falta tanto por aprender. En realidad soy yo quien aprende más de los niños que ellos de mí, mi paciencia, impaciencia, mis talentos, mis debilidades, mis virtudes y mis vicios se ven reflejados y expuestos por completo al convivir con los niños y ahí es donde me reconozco y puedo ver si esa persona -que soy yo misma- me gusta o no.
- Es una tremenda responsabilidad y alegría saber que las raíces que los niños forman día a día forja su carácter, su corazón, su vida… y que es este primer calor de hogar es el que les brinda las raíces en el árbol de la vida.
Este Blog que tiene diversidad de temas, como los tiene cualquier mamá, esta es una bitácora de sólo una mamá, una mamá que quiere amar, servir, criar, educar, alimentar, enseñar, dar testimonio, preparar e intentar ser útil en esta labor múltiple que es la de ser mamá.
Ser una mamá que acuna y cría dando raíces dentro de nuestro árbol familiar y alas para que puedan volar hacia su propio nido.